El Brasil de Jair Bolsonaro
Si bien ha transcurrido escaso tiempo desde que Jair Bolsonaro asumiera como Presidente del Brasil, se pueden trazar ciertos lineamientos sobre la conformación de su gobierno, sus principales metas, los apoyos del Congreso y el que proviene de diversos sectores de la sociedad brasileña
El gobierno tiene cuatro bases de sustentación fundamentales que son: el grupo militar; el económico de fuerte ascendencia liberal; los integrantes de la iglesia evangélica y por último los provenientes de la influencia de ultraderecha del filósofo Olavo de Carvalho.
El grupo militar tiene un peso decisivo en el gabinete y algunos de sus integrantes gozan de prestigio y es desde el punto de vista de la sociedad el que tiene la mejor imagen.
El equipo económico conformado por Pablo Guedes de neto corte liberal, con mucha influencia del modelo de reformas de Chile, ha acumulado un gran poder y se dispone a llevar a cabo grandes transformaciones, entre ellas, proceder a abrir la economía de ese país, negociando a través del Mercosur o de ser necesario avanzando por su propia iniciativa, es en este sentido como debe verse la próxima visita oficial de Bolsonaro a los Estados Unidos en marzo.
Los integrantes de la iglesia evangélica han sido un gran soporte durante la campaña presidencial y ahora participan activamente en el gabinete, teniendo a su cargo la cartera de Niñez y Familia así como el ministerio responsable de la Política Agropecuaria.
Por último, con sus recomendaciones para dos ministerios claves, Educación y Relaciones Exteriores, la influencia del pensador Olavo de Carvalho se ha hecho notar. En el caso de este último el canciller designado Ernesto Araújo es un ferviente admirador de Donald Trump, un negacionista del medio ambiente pues considera que este tema ha sido armado por los chinos. Además, visualiza a la globalización como un arma de penetración del marxismo cultural.
Los ejes centrales del Gobierno de Bolsonaro van en primer término por el lado de la seguridad, donde el famoso juez Sergio Moro tendrá a su cargo las principales reformas con respecto a las fuerzas de seguridad y la represión del delito; mientras tanto ya se sancionó un decreto que facilita la portación y uso de armas por parte de los particulares; en la parte económica se espera una amplia reforma previsional, luego de esta una simplificación y reducción de tributos y una ampliación de la reforma laboral; también mayores posibilidades de explotación agropecuaria y minera, así como una reducción de la participación del Estado en la economía; el tercer eje es un muy posible alineamiento con los Estados Unidos, con determinados países de Europa y un intento – veremos hasta donde – de reducir el relacionamiento con China. En el área latinoamericana hay un claro acercamiento hacia Chile y el arco del Pacífico, en particular.
En cuanto a los apoyos del Congreso, hay una bancada BBB: por Bala – seguridad – , Buey . a favor del agro-business y B – Biblia – los evangélicos, que forman un total de 200 sobre 500 legisladores y aseguran con aliados, mayorías para tratar los temas más importantes.
Todo esto indicaría prima facie que la Administración Bolsonaro debería tener el éxito asegurado y por lo tanto, tendería a beneficiar a nuestro país. Sin embargo, persisten muchas dudas, hay una influencia que irrita y mucho a los miembros del gabinete, proveniente de los tres hijos de Bolsonaro que no tienen cargos, pero si mueven mucho lobbying. El otro aspecto se refiere a los evangélicos que empiezan a plantear temas que afectan a minorías importantes como es por ejemplo la comunidad LGBT.
Por último, el propio presidente que si bien ha ejercido más de dos décadas como legislador, siempre resultó un personaje opaco, poco relevante y ahora se encuentra frente a un desafío enorme que hasta ahora, le cuesta asumir ya que sigue actuado en modo campaña, algo que se vio con claridad en su presentación en Davos frente al World Economic Forum.
