La Argentina tendrá en 2017 una economía de dos velocidades
Tres meses atrás, los analistas tenían la percepción de que después del segundo trimestre del año, período en el que la actividad recibió un duro golpe por el salto inflacionario de las tarifas y las inundaciones que frenaron al campo y a la construcción, la recuperación iba a tener un curso casi asegurado.
Esa hipótesis se disolvió. Septiembre y octubre mostraron que la caída no se detuvo y que el repunte se dará, pero desde un piso más bajo.
La inflación comenzó a desacelerarse, es cierto, pero el consumo no mejoró de la misma forma. Por eso los consultores en la última semana corrigieron sus estimaciones y apuntaron para 2016 una caída del PBI superior a 2%.
Brasil tampoco muestra una mejor perspectiva. Economistas de sus principales bancos le adjudican al 2017 un crecimiento de apenas 1%, lo que implica que el mejor pronóstico para el principal socio del Mercosur es que siga el estancamiento.
Para la Argentina, eso equivale a ratificar que el año entrante la economía continuará operando a dos velocidades. La industria está atada a la demanda del país vecino, con lo cual no cabe esperar un mayor dinamismo en el sector fabril, que además sigue atenazado por un tipo de cambio deprimido.
El agro será uno de los pilares del 2017, ya que contará con más dólares frescos gracias a su mayor apuesta al trigo y al maíz. La energía hará punta en materia de inversiones. El blanqueo y la obra pública dinamizarán a la construcción. No hay apuestas firmes hasta ahora sobre en qué momento el consumo se enganchará a este tren.
Fuente: cronista.com
Autor: HERNÁN DE GOÑI