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La IA y la automatización se meten de lleno en los aeropuertos de la región

La IA y la automatización se meten de lleno en los aeropuertos de la región

El aumento del flujo de pasajeros en Latinoamérica impone la necesidad urgente de incorporar tecnologías que permitan optimizar sus operaciones y así beneficiar a sus pasajeros.


El tráfico aéreo global continúa su imparable ascenso: según un informe de S&P Global, durante 2023 el volumen de tráfico en los aeropuertos de América Latina creció en promedio un 18%, y al 2030 se espera que este índice se incremente a los 12 mil millones a nivel mundial. 

Tal auge de la demanda pone a prueba la capacidad de los aeropuertos, especialmente en momentos críticos de transición, como durante la ampliación o construcción de nuevos terminales.  

Un claro ejemplo de estos retos se refleja en el Aeropuerto Internacional Jorge Chávez de Lima, cuya nueva terminal que debía inaugurarse en 2024, ha experimentado retrasos debido a complicaciones en la ampliación de infraestructura. Tal demora pone en evidencia aún más la necesidad de implementar tecnologías avanzadas que ayuden a optimizar los recursos operacionales y reducir los impactos de estas transiciones, beneficiando tanto a las aerolíneas como a los pasajeros.

Federico dos Reis, CEO de INFORM consideró que la “automatización y la IA no son sólo ventajas, sino una necesidad para garantizar una operación fluida. Estas tecnologías permiten optimizar la asignación de recursos y mejorar la capacidad de respuesta ante imprevistos, reduciendo tiempos de inactividad y riesgos operacionales”, comenta el ejecutivo.

En un contexto actual altamente demandante, una planificación automática de turnos del personal y una asignación en tiempo real de tareas, gracias a la digitalización y la automatización de procesos, se han vuelto esenciales.

Y es que en aeropuertos de la región, como el de Santiago de Chile y El Dorado en Bogotá, las aerolíneas y proveedores de servicios terrestres están implementando tecnologías similares. En el caso de Santiago la nueva terminal duplicó su capacidad de 16 millones a 38 millones de pasajeros anuales, mientras que El Dorado, con 40 millones de viajeros, está evaluando proyectos que le permitan alcanzar los 60 millones en los próximos años.

“El uso de herramientas como nuestra suite integral de soluciones GroundStar no solo buscan optimizar la asignación de personal, equipos y tareas, sino que también permiten una supervisión en tiempo real de las operaciones, facilitando la toma de decisiones rápidas y precisas”, añade dos Reis. 

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