Negocios en Malasia
Secretos para desembarcar con éxito en este lejano país o bien para conocer más sobre una cultura diferente.
Malasia es una de las once naciones que forma parte del Sudeste Asiático. Es un país medianamente joven que se declaró independiente de la corona británica en 1957. Históricamente fue el eje central de una intensa zona de intercambio comercial por su posición geoestratégica como puerta de acceso a Asia y nexo con Oceanía. Hoy, como nuevo estado industrializado sigue el ejemplo de los tigres asiáticos.
Mi experiencia de viaje por Malasia me sorprendió con un atractivo particular: “ser un país multiétnico”, en él conviven malayos, chinos e indios, lo que hace innegable que la religión sea un factor influyente en la vida diaria y en el mundo de los negocios. El islam es el culto practicado por la mayoría, siguiéndole el taoísmo y el hinduismo, cada grupo étnico posee su propio ritmo para encarar relaciones comerciales y por lo tanto, los empresarios que tengan intenciones en hacer negocios, es importante que se adecúen y respeten el protocolo.
A la hora de negociar en esta zona del mundo, la “confianza” es un valor fundamental y se logra a través del contacto personal, por ello es fundamental que los empresarios argentinos que deseen concretar negocios visiten personalmente las empresas malayas, la visita es el puntapié inicial para ingresar al mercado, en contrapartida, los empresarios malayos demuestran su agradecimiento y son hospitalarios con sus visitantes, independientemente de que se cierren o no los negocios.
¿Cómo llegar?
Desde Buenos Aires, las opciones más directas y no tan costosas son vía Sudáfrica o bien vía Doha, Qatar. Como el aeropuerto de Kuala Lumpur se encuentra a una hora de la ciudad, se aconseja contratar el transfer de traslado del aeropuerto al hotel desde Argentina para evitar demoras y además, es aconsejable tomar el recaudo de cambiar moneda en el mismo aeropuerto de arribo (1 USD= 2,90 Ringgit).Los argentinos no necesitan tramitar visa para ingresar a Malasia ni tampoco se exigen vacunas.
Idioma
El Bahasa Malayo es el idioma oficial, sin embargo la población toda puede hablar inglés fluídamente pero con el acento propio de oriente, el cual no es tan accesible a nuestro oído. Se recomienda que los empresarios tengan su inglés bien fluido para poder avanzar en las negociaciones y trasladarse sin dificultades dentro de la ciudad.
Agenda de viajes
Al momento de iniciar la agenda de visitas es recomendable organizarse previamente teniendo en cuenta algunos detalles: el sistema de transporte público, en particular el tren de alta velocidad es adecuado para el traslado dentro de la ciudad e incluso para viajar otras ciudades del interior. El sistema de trenes de proporciona frecuencias y puntualidad en sus horarios, con la posibilidad de llegar a destino con mayor confort y en menor tiempo. Los taxis funcionan sin inconvenientes en toda la ciudad, sin ánimo de discriminar, los vehículos conducidos por los malayos chinos son los menos confiables, de todos modos siempre es recomendable negociar la tarifa antes de iniciar el trayecto. La impuntualidad no está mal vista pues se entiende que surjan imprevistos durante el trayecto por los embotellamientos y las multitudes en las horas picos, característicos de oriente.
Protocolo empresarial
Otro aspecto a considerar dentro de la agenda es la duración de las reuniones, dado que los empresarios malayos son amables con sus visitantes, es habitual la invitación a una comida como una forma de agradecimiento por la visita, sin importar el tiempo que dure la reunión. No obstante, es conveniente preparar el paladar para aceptar invitaciones a comidas de origen malayo, indio o chino.
Nunca está demás aclarar al momento de ordenar un plato que el mismo “no sea picante” sobre todo si lo invitan a una comida india, y si el empresario es un malayo chino lo mas probable es que lo lleve a un restaurant chino, a donde tampoco está mal pedir que sirvan utensilios en vez de “chops” para las comidas, pues ellos comprenden que para los occidentales es mas sencillo el uso utensilios.
Una regla de protocolo muy usada en Oriente es que al momento de recibir la tarjeta de presentación se debe tomarla con las dos manos, leerla asegurándose de entender el nombre de la contraparte y el cargo que ocupa, como una señal de respeto e interés por quien se intenta establecer una relación comercial. La tarjeta personal debe estar escrita en inglés, ya que el español es un idioma totalmente desconocido por ellos.
Oportunidades comerciales
Si bien la federación de Malasia es un país rico en recursos como petróleo, caucho, aceite de palma y estaño, en los últimos años el mercado malayo ha buscado en Argentina comprar vinos, mostos de uva, semillas de girasol, aceite de oliva y cables de aluminio. Además, como todo estado en pleno crecimiento la construcción es un rubro a prestar atención, pues las inversiones en infraestructura pública y privada ocupan un lugar importante en la economía malaya.