El subibaja del comercio exterior

A fines de 2015 cuando asumió como presidente Mauricio Macri, Argentina ya sobrepasaba los 3000 millones de dólares de déficit de balanza comercial.

Durante los primeros tres meses del 2016 el gobierno se fue acomodando, y a partir de abril comienza una recuperación que pudo mantenerse durante todo ese año. Cabe señalar que ese desempeño se dio en el marco de un desplome importador, y no por un aumento de las exportaciones como todos esperaban.
El 2016, finaliza entonces con un saldo positivo cercano a los u$s 2130 millones, debido a un incremento del 1,6% en exportaciones y una baja del 6,9% en importación. El periodo 2017 muestra que los envíos al exterior de productos primarios treparon casi un 18%, mientras las manufacturas de origen agropecuario (MOA) lo hicieron un 0,2%. Los combustibles y energía bajaron un 11,5% y las manufacturas de origen industrial (MOI) por su parte cayeron el 6,6%.
En la otra vereda, en el 2016 y comparando los números con el 2015, la importación de combustibles bajo casi un 31%, los bienes intermedios un 14%, y las partes y piezas para bienes de capital se redujeron un 10,8%. Las que si crecieron son las de automotores de pasajeros por encima del 33%, mientras los bienes de consumo treparon el 9% y bienes de capital un 2,2%.
El primer año de la gestión Macri, muestra que tanto las exportaciones como las importaciones tuvieron dinámicas parecidas y ello permitió sostener la balanza comercial en positivo. No obstante, a fines del 2016 y hasta octubre 2017 las importaciones comienzan a ganar terreno sostenidamente, mientras las exportaciones tienden a una baja constante y sin freno. Así, la realidad nos muestra un déficit de balanza comercial solo medido hasta octubre de 6.115 millones de dólares, y se espera que al contabilizar noviembre y diciembre ese número alcance y quizás supere los 8.000 millones.
La explicación de estos desajustes comerciales, son en gran medida fruto del efecto Brasil, donde podremos ubicar el saldo negativo en torno a los 9.000 millones en 2017, con un incremento importador por arriba del 30% mientras solo del 4,3% en expo. Argentina en 2016 finalizó con un rojo de balanza con nuestro principal socio cercano a los 3.075 millones de dólares. Este desbalance, nos posiciona con el peor déficit en materia de intercambio de la historia con Brasil.
Entender lo que sucede, sin tener en cuenta el contexto es inútil, hay que contrastar las cifras de la balanza comercial a lo largo de los años, el dato será muy útil para dimensionar en las condiciones que estamos.

Fuente Redacción
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