La lucha por el frugal comercio portuario
El frugal régimen de importaciones que el Gobierno le impuso al comercio exterior argentino es demasiado estricto para los estómagos de los principales operadores portuarios del mundo.
Puerto Nuevo (Terminales Río de la Plata, Bactssa y Terminal 4) tocaron un pico de poco más de 1,2 millón de TEU en 2008, sin contar a Exolgan, el coloso de Dock Sud. Desde entonces, la actividad cayó. Y hoy está en los mismos niveles de hace 10 años. Con un nuevo jugador: Tecplata.
La terminal 5 (a cargo de Bactssa, integrante del holding HPH) tiene vida hasta octubre, momento en que se le vence la prórroga que el ministro Julio De Vido le otorgó en 2012, cuando finalizaba su contrato.
La Administración General de Puertos (AGP), sociedad del Estado que controla a los concesionarios, llamó en diciembre último a licitación pública internacional, y ofreció 30 años más 10 de prórroga. Los sobres deberían abrirse a fines de este mes. Pero todo indica que eso no va a suceder: Ictsi, el viejo vecino de Puerto Nuevo y principal accionista de Tecplata -la terminal de contenedores de Puerto La Plata- pidió suspender la licitación porque sostiene que está hecha “a la medida de Bactssa”.
¿Cuál es el contexto de esta pugna? La AGP tiene como objetivos excluyente tranquilizar los ánimos de los trabajadores y modernizar al puerto lo antes posible. Ictsi, en tanto, no empezó a operar y apuesta desde el minuto cero de su proyecto que demandó más de 450 millones de dólares a que el puerto de Buenos Aires se quede con dos terminales, es decir, dos concesionarios, no tres, como desde la década del 90.
La AGP debe ahora resolver dos urgencias: la inversión en un puerto que se torna obsoleto y la solución de una competencia excesiva en la que no se reparó en la “década concesionada”.
Ictsi, en tanto, debe lograr como sea un contrato con una naviera. El proyecto Tecplata comenzó a gestarse en 2008, y fue un parto: se objetó su concesión directa, se objetaron sus permisos ambientales y sufrió los paros de la Uocra (que copó el acto en el que el gobernador Daniel Scioli selló el final de obra). Pero ahí está. Con grúas, sin buques: en todos estos años la respuesta ante la pregunta de qué naviera debutaría allí era, indefectiblemente, alguna de las siguientes: “Estamos esperando terminar el muelle”; “Estamos esperando que lleguen las grúas”; “Estamos en conversaciones con todos”; “Estamos negociando con todos…”.
En el sector están convencidos de que Ictsi apostó a heredar los servicios que quedarían huérfanos con el fin de la concesión de Bactssa. Pero la AGP resolvió otra cosa. Es más, permitiría que, luego de unos años, se fusionen dos terminales en Puerto Nuevo, siempre y cuando queden dos terminales que aseguren la libre competencia, confirmando así otro rumor: que Terminal 4 podría absorber a la 5.
Sólo Bactssa e Ictsi pagaron los US$ 180.000 del pliego de licitación. Pero, según se desprende del pliego, de los dos interesados al día de hoy sólo Bactssa podría ganar la licitación: el texto impide que se presente un “competidor” directo del sistema portuario con ingerencia en el hinterland. Nadie desde Zárate hasta La Plata, ni siquiera de Montevideo. Bactssa, al no competir con sí misma, puede presentarse.
Dos puntos critica Ictsi en su objeción que está cerca de judicializarse -habida cuenta de que la AGP no dará el brazo a torcer en los planteos de este operador- que son: la capacidad global operativa, y el pasivo social.
La AGP exige que el nuevo concesionario cuente con al menos tres terminales en todo el mundo que operen 800.000 TEU cada una, y un movimiento global de 6 millones de TEU. Además, señala que si el nuevo huésped decide echar a alguien dentro de los dos primeros años de concesión deberá pagarle el doble de indemnización.
REPERCUSIONES
El Centro de Navegación, uno de los que recibió la carta de Ictsi solicitando la suspensión de la licitación, sólo respondió que “la Comisión (Directiva) se reunirá el 10 de este mes” y que hasta entonces declinaban hacer declaraciones al respecto.
Por su parte, el gerente general de Bactssa, Carlos Larghi, se excusó de realizar declaraciones por encontrarse de vacaciones.
Tanto la Cámara de Concesionarios de Puerto Nuevo como el Sindicato de Guincheros respondieron las consultas de La Nacion (de lo que se informa por separado).
Por su parte, Eduardo Zabalza, gerente general de Tecplata y vocero de Ictsi en este conflicto, justificó el pedido de suspensión: “Está hecha (la licitación) a medida de Bactssa”.
“Pusieron condiciones para que no se presente nadie. Los que cumplen con los requisitos de capacidad están ya operando en Buenos Aires y no se pueden presentar. Los otros que cumplen, no conocen el mercado, pero tendrían que invertir US$ 390 millones, conseguir luego los permisos ambientales y asumir el riesgo de un pasivo laboral de entre US$ 35 y 40 millones, si decidieran desprenderse de la gente, porque en los dos primeros años obliga a pagar doble indemnización a los despedidos”, argumentó Zabalza.
El gerente de Tecplata sostuvo, desde un primer momento, “que en Buenos Aires hay sobreoferta” y propuso, a cambio de suspender la licitación “dos años de prórroga para tener en cuenta el factor laboral y estudiar qué hacer con el puerto de Buenos Aires consultando, sobre todo, a la ciudad de Buenos Aries: el puerto quiere crecer, pero no se hace respecto de los accesos terrestres”, agregó.
¿Tienen interés en participar de la licitación o es sólo una maniobra política?, le preguntó La Nacion a Zabalza: “Lo ideal es que queden en Buenos Aires dos terminales”, respondió.
A su turno, Sergio Borrelli, interventor de la AGP, destacó: “Vamos a preservar la licitación. No podemos soslayar a los trabajadores. Tenemos un mandato de la Presidenta de licitar. Estos pliegos fueron remitidos a nuestro accionista, que es el Estado, y el Ministerio de Transporte lo aprobó”. “Debemos pensar en la estabilidad de los puestos de trabajo”, agregó.
Respecto de los planteos de Ictsi, Borrelli descartó que Bactssa cuente con privilegios: “A todos les cuesta lo mismo entrar a invertir, lo mismo que el pasivo social: Bactssa no se ahorra despidos, en todo caso los posterga por dos años para evitar la doble indemnización”, dijo.
En cuanto a la capacidad operativa global del candidato, Borrelli señaló que el puerto de Buenos Aires “no tiene por qué ir a menos después de contar con la experiencia de un jugador global. Y Bactssa puede presentarse porque no compite con sí misma. Además, tengo que preservar la licitación de las típicas jugadas que hace Ictsi, que impugna para impedir el avance de las obras y judicializa los expedientes. Nosotros necesitamos hacer obras”.
“En todo caso, ¿qué tiene que ver el puerto de Buenos Aires con Tecplata? ¿Qué hace Ictsi opinando sobre lo que le conviene al puerto? Es un particular que está tratando de resolver problemas comerciales por otra vía, y lejos de probar si pueden conquistar mercado trata de detener la licitación que en nada perjudica al Puerto La Plata”, subrayó Borrelli.
Nación, Provincia y Ciudad deberán arbitrar los mecanismos de diálogo y planificación portuaria, cuanto antes.
PUERTO NUEVO
“No vamos a permitir que una multinacional (por Ictsi) juegue con la estabilidad y los puestos de trabajo”, señaló a la nacion Roberto Coria, secretario general del sindicato de Guincheros. ?Los gremios portuarios, en el marco de la Fempinra, le solicitó para esta semana una reunión al interventor de la AGP, Sergio Borrelli. “Queremos discutir sólo cómo crear nuevos puestos de trabajo o mejorar las condiciones actuales, pero no en detrimento del cierre de una terminal como Bactssa porque si esta licitación la quieren impugnar en sede judicial, las otras corren el mismo destino”, dijo Coria, tras agregar: “No puede ser que esta multinacional que fracasó en Rosario e hizo negocio en Buenos Aires (estuvo en la 5, y luego se la vendió a HPH) impugne cuando hay 1000 familias de por medio”, agregó.?Para Coria, Tecplata “tiene que funcionar porque es trabajo genuino, pero no a costa del cierre de otros puestos de trabajo”. ?La Nacion intentó comunicarse con Juan Corvalán, titular del SUPA (estibadores) para tener su visión, pero sin éxito.
QUÉ DICE LA PARTE SINDICAL
Coria (Guincheros) defiende la licitación
La carta con el pedido de suspensión que cursó Ictsi también se dirigió a la Cámara de Concesionarios de Puerto Nuevo que, ante una consulta de la nacion, se mostró “preocupada por las impugnaciones que pretenden bloquear inversiones en el puerto de Buenos Aires para obtener cargas, o buques, o clientes que, compitiendo legítimamente no conseguirían”, señalaron desde la cámara, tras agregar: “El comercio exterior elige el puerto de Buenos Aires y Exolgan porque son los que hacen más eficiente la cadena del transporte, tanto desde el puerto para las importaciones como hacia el puerto para las exportaciones y, además, es el único puerto con conexión ferroviaria a todas las economías regionales”. Puerto Nuevo expone que “el 85% de la carga está al norte de Buenos Aires” y que “impedir que (el puerto) se modernice es obligar a la carga a pagar US$ 200 de sobrecosto de transporte terrestre (para ir a La Plata)”.
Fuente: La Nación