¿CAMBIA ALGO EN LA ECONOMÍA?

En plena campaña electoral, donde la Presidenta le puso el cuerpo a la candidatura del tibio Martín Insaurralde, y con distintos problemas de ribetes económicos que atender, entre ellos el conflicto con los fondos buitre y el siempre inquieto tipo de cambio, la salud de Cristina Fernández suma otro factor de incertidumbre a la economía.

Como se sabe, la jefa de la Casa Rosada es la mediadora natural y quien, en definitiva, toma las decisiones en un equipo económico con figuras que hasta suelen aparecer enfrentadas, como el secretario de Comercio, Guillermo Moreno, el viceministro Axel Kicillof y el titular de la Afip, Ricardo Etchegaray.

Más de una vez ha sido la propia Cristina la que los ha puesto en línea en esos criterios divergentes, aún cuando las medidas que ella haya alentado no dieran los resultados esperados. El caso más reciente y fresco es el del blanqueo de capitales que se extendió por tres meses más.

Algunos miembros del Gobierno descuentan de que ella, en su resposo, seguirá atenta a los grandes temas, pero sus médicos le han sugerido todo lo contrario: un descanso reparador.

Ahora con la intervención quirúrgica, podría llevar el tiempo de recuperación a mucho más de un mes y ahí sí, con la segura derrota electoral del 27, más las grandes decisiones esperando el regreso de su administradora natural, las cosas se complicarían con pronóstico incierto.

Por ello, de la salud de la mandataria está también colgada la economía.