Alertan que la crisis petrolera argentina es mucho más grave de lo que se conoce

El país tiene dificultades para colocar petróleo en el exterior por la sobreoferta de crudo y además el consumo del mercado interno se encuentra en el mínimo. Hay más de 20 mil operarios parados.

En un informe especial, el Diario de Río Negro alertó que crisis petrolera argentina es mucho más grave de lo que se la conoce y se la describe hasta el momento y adelanta serios problemas para que la industria pueda cumplir con los salarios y las obligaciones.

Desde las empresas y las provincias productoras de petróleo “se buscan salvavidas para quedar a flote del naufragio de esta tormenta perfecta, y mientras se debaten medidas como un nuevo barril criollo o la eliminación de las retenciones a las exportaciones, son pocas las señales de cómo será el día después de mañana, el día después de la finalización de la cuarentena”, menciona el informe de la periodista especializada Victoria Terzaghi.

La publicación menciona que la “parálisis nacional que causó el Covid-19 derrumbó las ventas de combustibles y llevó a que el sobrante de producción sea tal que ya hay empresas que han tenido que cerrar producción al no encontrar dónde colocarla. “Si no hay demanda, no hay inversión”, resumió el directivo de una petrolera no integrada para advertir el complejo escenario que está por delante”.

“Nadie sabe a ciencia cierta cuándo y cómo se saldrá de la cuarentena que mantiene las ventas de combustibles por el piso, con una caída general de más del 70%. Este menor consumo hace que los tanques de acopio de todo el país estén repletos de petróleo sin destino y mientras algunas pequeñas firmas ya aplicaron restricciones a la producción, otras lo están analizando ante la dificultad de avanzar en el corto plazo en exportaciones de crudo”, agrega.

Sacar los barriles argentinos al exterior “implica varios problemas”. “Por un lado el precio internacional está deprimido y marcaría que, de avanzarse en el plan del barril criollo, habría dos tipos de barriles vigentes en el país: uno a un precio sostén y otro a un valor externo mucho menor”, dice.

“Lo más complejo de avanzar en el mercado exportador es conseguir los buques para llevar la carga y competir a su vez en un mercado global en donde sobra petróleo. Desde varias firmas comenzó a estudiarse el mercado latinoamericano, como potencial destino para el crudo argentino que hoy sobra a razón de unos 210.000 barriles por día”, contabiliza.

Pero además, “no todas las empresas pueden aspirar a llenar un carguero para evacuar su producción, dado que un buque promedio acopia entre 140.000 y 800.000 barriles, ya sea para destinos cortos o intercontinentales. Esto implica que un buque de gran escala demanda la producción integral que alcanza Argentina en casi dos días, pero uno con destino regional también excede la producción sin destino de casi todas las firmas”, evalúa.

Desde algunas operadoras pequeñas, indica el informe del diario de Río Negro, se contó que una alternativa que estudian es la de poder realizar exportaciones colectivas, montados sobre la base de la producción de YPF que representa casi la mitad de la generación nacional.

“Es por esto que el camino del cierre de producción es una realidad casi palpable para muchas firmas, en especial las más pequeñas. Y parafraseando al directivo antes citado, sin producción no hay caja para pagar sueldos y contratos”, alerta la nota.

Más de 20.000 de 25.000 trabajadores que hoy están en sus casas.

“La crisis abierta con las PASO del 2019 marcó que las firmas tenían un exceso de trabajadores y la posterior pandemia del coronavirus terminó haciendo de la Meca del shale argentino (Vaca Muerta) todo un pueblo fantasma en donde el panorama es que sobran trabajadores y faltan inversiones”, remarca.