El campo frente a la cosecha: suben costos impositivos y se llevan el 65% de la renta
En el inicio de 2024, subió el índice de los impuestos al productor y, en este contexto, suben los costos y caen los precios. La Fundación FADA analiza el peso de los tributos en el agro a nivel nacional y en las provincias.
Por Carlos Petroli, Especial para Container.
En el arranque de 2024, el 65% de la renta del productor queda en manos del Estado en sus diferentes niveles: 94% nacionales, 5% provinciales y el resto municipales. Este índice, elaborado por la Fundación Agropecuaria para el Desarrollo de Argentina (FADA), con sede en Río Cuarto, subió seis puntos desde la última medición de diciembre; los principales motivos son: suba de costos y caída de precios, una combinación que incrementa los riesgos en la actividad.
El informe elaborado por Nicolle Pisani Claro, economista jefe de FADA, y su colega Natalia Ariño, anota que en las provincias Córdoba registra un 64,9%, Buenos Aires 61,9%, Santa Fe 61,1%, La Pampa 62,9%, Entre Ríos 65,4% y San Luis 59,9% en la participación tributaria sobre la renta agrícola.
El índice FADA mide cuánto de la renta agrícola se va en impuestos. La renta es el resultado de restarle los costos de producir al valor de esa producción. Si cae el precio o suben los costos, la renta se achica. Pero el tema es que los impuestos no se reducen en la misma proporción que la renta; es más, casi que no lo hacen. Es por esto que cuando el valor cae o los costos suben, la participación de los impuestos sobre la renta aumenta. Esto es lo que arrojó esta medición; por eso el Índice FADA es seis puntos mayor que la última edición, explican las economistas.
Coparticipación: lo que no vuelve.
Dentro de los impuestos nacionales, el 67% no se coparticipa a las provincias, es decir, no vuelven a las regiones que lo produjeron. De aquí se desprende la discusión sobre el federalismo de un esquema en el que la mayor parte de lo recaudado no se reparte a las provincias, en una actividad que por definición es federal y está arraigada a las distintas regiones del país, destaca Ariño.
Para la medición a nivel provincial, se conjugan los rindes, los impuestos provinciales y locales, y los fletes, que generan efectos diferenciados sobre cada uno de los cultivos, así como la proporción de cada cultivo en el área sembrada de cada provincia.
En esta medición se consideraron los incrementos para este año del inmobiliario rural, tasas y guías municipales. En el caso particular del inmobiliario, dependiendo de cada provincia, se registraron incrementos que van desde el 180% hasta 250%.
¿Qué pasó con los costos?
En cuanto a los costos de insumos, el informe revela que los fletes se incrementaron 42% en pesos, frente a diciembre 2023. La labor de siembra 59% y la cosecha 132%. Respecto a marzo 2023, se ven aumentos en fletes del 206% y de labores entre 170% y 260%.
El estudio identifica que un 49% de los costos de una hectárea de soja están dolarizados mientras que el restante 51% está pesificado. Si se considera el costo de la tierra dentro del esquema de costos, aquellos que son dolarizados en una hectárea de soja pasan a representar el 62%.
En el caso del maíz, debido a que los fertilizantes y semillas tienen más peso que en el caso de la soja, los costos dolarizados ascienden al 53% de la estructura; si se considera el costo de la tierra, el peso de los costos dolarizados asciende al 60%.
Caída de precios.
El análisis de FADA agrega que, aun con mayores niveles de producción esperados tras la recuperación de la sequía, la caída de precios reduce el valor bruto de la cosecha. En este contexto, con menores precios, costos que se incrementan y actualizaciones de impuestos provinciales y municipales, “se genera una presión mayor en la participación del Estado en la renta agrícola”, advierte.
La mayor caída de precios se presenta en trigo, el cual a su vez indicó la mayor participación del Estado en la renta en marzo 2024. En este contexto y frente a la próxima campaña fina, los números comienzan a ajustar, considerando que esta caída de precios viene acompañada de incrementos en los insumos y servicios.
