El Gobierno corta flores, pero el mercado no ve la primavera

Por Lic. Nancy Villarruel, Economista .

“Podrán cortar todas las flores, pero no podrán detener la primavera”. (Pablo Neruda).

A un mes de asumir, Massa consiguió sumar reservas con el FMI y un dólar diferencial para el complejo sojero. Pero nuevamente aparecieron “ruidos”. Las medidas tendían a acotar los flujos por dónde salen los dólares del Central y a promover el ingreso de divisas. Ambos objetivos fueron logrados pero más temprano que tarde el Gobierno sacó a relucir su falta de plan, su falta de consenso interno y una nueva medida del BCRA puso al mercado en alerta.  El resultado fue una reacción rápida en los dólares financieros y en las tasas de los futuros. Resumiendo la semana: el dólar soja logró calmar transitoriamente las expectativas devaluatorias que dirigían las decisiones de inversión. Pero al cierre, esas expectativas ya son prácticamente idénticas o superiores al pre dólar “soja”.

El 30 de este mes la medida llega a su fin, y sin incentivos adicionales al sector exportador a la vista, las reservas del BCRA deberían alcanzar hasta mayo del próximo año, cuando comienza a liquidarse la cosecha gruesa. Los precios de los dólares financieros (blue, CCL y MEP) ponen en duda que el Gobierno logre llegar a las elecciones sin tener que devaluar.

El tipo de cambio oficial volvió a moderar el ritmo de suba desconcertando a exportadores y dejando sin brújula al mercado. No obstante, pese a las intervenciones del BCRA y a la moderación en la devaluación del dólar oficial, la brecha con el MEP y el CCL subió al 109% y 115% Los datos de ingresos y gastos fiscales no fueron alentadores. El déficit primario rozó el 3% del PBI. El gasto ha subido más que los ingresos. En una semana más culmina el tercer trimestre sujeto a revisión del FMI. Con respecto a las reservas, el mejoramiento por el dólar soja más el aporte del FMI se diluyó con los pagos adeudados a ese y otros organismos multilaterales.

Hasta aquí, el Gobierno estuvo intentando cortar flores, pero el mundo también está sumido en inflación. La suba de tasas mundiales es un hecho y para Argentina el encarecimiento del crédito se vuelve otro obstáculo. Errar ya no es gratis. El costo se paga en términos de falta de competitividad, escasez de reservas, crédito escaso o nulo, pérdida de mercados y sobre todo de bienestar para los ciudadanos.

Queremos poder circular en paz por las calles, ver que nuestros ingresos alcancen para llegar a fin de mes sin sofocones y poder planificar un futuro en este país. La primavera ya llegó, falta que florezcan nuestros sueños. Stay tunned!